Estudio
En su origen la iglesia contaba con planta basilical de tres naves y ábside semicircular que se encontraba separado por un arco toral apuntado, con comunicación con las naves. En la actualidad la iglesia se compone de un cuerpo rectangular y el ábside semicircular, dos arcos torales interiores de sección ojival o apuntada, bóvedas de luneto tabicadas cubriendo la nave central y bóveda y semicúpula de cantería sobre la capilla mayor. En el análisis geométrico se han detectado deformaciones importantes visibles en los desplomes de las fachadas norte y sur, incluidos los correspondientes estribos, desplomes siempre hacia el exterior del edificio independientemente de su orientación geográfica. Según los datos del levantamiento topográfico 3D, la fachada norte presenta una deformación mayor que la fachada sur. Sobre el cuerpo central ha existido una sobrecarga que justifica las grietas tantos en los estribos laterales como en la coronación de los arcos fajones. Se ha realizado un análisis tensional de cada elemento que pueda ser causante de patología.
Diagnóstico y propuesta de actuación
Con los resultados de los análisis anteriores se propone: En los arcos torales y estribos de la fachada norte y para conseguir la estabilidad del sistema, colocar una carga adicional sobre el arranque de cada arco toral, repartido en dos paquetes a los lados del arco en cada arranque. En la entrada sur, aligerar interiormente la cubierta para aliviar los esfuerzos sobre el pórtico. Colocar una sobrecarga adicional en los arranques de cada arco.
Cliente: Fundación Rei Afonso Henriques
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